La epididimitis es la inflamación del epidídimo (el tubo enrollado que se encuentra situado sobre el testículo y que proporciona el espacio y el medio adecuados para la maduración de los espermatozoides) y la epididimoorquitis es la inflamación conjunta del epidídimo y el testículo.
Los hombres pueden tener hinchazón y sensibilidad o dolor.
El diagnóstico de la epididimitis y de la epididimoorquitis se basa en la exploración física, análisis de orina y a veces ecografía Doppler.
El tratamiento suele incluir antibióticos por vía oral, reposo en cama, analgésicos y aplicación de bolsas de hielo sobre el escroto.
Por lo general, tanto la epididimitis como la epididimoorquitis están producidas por una infección bacteriana, que puede ser consecuencia de una intervención quirúrgica, de la inserción de una sonda en la vejiga o de la propagación de infecciones cutáneas originadas en otra parte de las vías urinarias. A veces, la causa es una infección de transmisión sexual. Entre las causas poco frecuentes están las infecciones producidas por ciertos virus u hongos.
A veces no hay infección de ningún tipo. En estos casos, se cree que la inflamación del epidídimo se produce por la llegada hasta ellos de un flujo retrógrado de orina, probablemente a causa de un esfuerzo (como cuando los hombres levantan algo muy pesado).
Síntomas de la epididimitis y la epididimoorquitis
Los síntomas de la epididimitis y de la epididimoorquitis incluyen
Hinchazón y sensibilidad de la zona afectada
Líquido alrededor de los testículos (hidrocele)
Fiebre (a veces)
El dolor puede resultar constante e intenso. Si la causa es una infección de transmisión sexual, puede haber secreción. En raras ocasiones se forma un absceso (acumulación de pus) que se nota en forma de bulto blando en el escroto.
Diagnóstico de la epididimitis y la epididimoorquitis
Evaluación médica
Análisis de orina
El diagnóstico de la epididimitis y de la epididimoorquitis se basa en la exploración física y en el análisis de orina. En algunas ocasiones se utiliza la ecografía Doppler para evaluar el flujo sanguíneo a los testículos.
Si la causa sospechada es una infección de transmisión sexual, el médico puede tomar una muestra con un hisopo uretral para detectar gonorrea y clamidia.
Tratamiento de la epididimitis y la epididimoorquitis
Antibióticos
Medidas para aliviar el dolor
La epididimitis y la epididimoorquitis suelen tratarse con antibióticos por vía oral, analgésicos y aplicación de bolsas de hielo sobre el escroto. La inmovilización del escroto mediante suspensorios disminuye el dolor producido por golpes leves repetidos.
Los abscesos suelen requerir drenaje quirúrgico.