La laberintitis purulenta es una infección bacteriana del oído interno que a menudo causa sordera y pérdida del equilibrio.
El laberinto es la cavidad ósea que contiene el oído interno. El oído interno contiene los órganos de la audición (la cóclea) y del equilibrio (véase también Introducción al oído interno).
La laberintitis purulenta suele ocurrir cuando las bacterias penetran en el oído interno durante una infección grave del oído medio (otitis media aguda), durante algunas formas de meningitis, o después de una fractura del hueso temporal del cráneo. También puede ocurrir cuando las personas tienen un tímpano perforado de forma crónica (como puede suceder en personas que sufren episodios repetidos de otitis media), particularmente cuando presentan un colesteatoma (una acumulación de material cutáneo) que crece en el tímpano perforado. Los colesteatomas no son cancerosos, pero pueden destruir el hueso.
Síntomas de la laberintitis purulenta
Los síntomas de la laberintitis purulenta incluyen:
Vértigo grave (una sensación de movimiento o de rotación que no se corresponde con la realidad) y nistagmo (sacudidas rápidas de los ojos en una dirección, alternando con un lento retorno a la posición original)
Náuseas y vómitos
Acúfenos (pitidos o zumbidos en el oído)
Diversos grados de pérdida auditiva
Los afectados suelen tener dolor y fiebre.
Diagnóstico de laberintitis purulenta
Tomografía computarizada (TC) y/o resonancia magnética nuclear (RMN).
A veces, una punción lumbar
Los médicos sospechan una laberintitis purulenta si la persona sufre vértigo, nistagmo, pérdida de audición o una combinación de los anteriores durante un episodio de otitis media aguda. Una infección crónica del oído medio o un colesteatoma aumenta el riesgo de laberintitis purulenta.
Los médicos solicitan una tomografía computarizada (TC) del cráneo para buscar anomalías en el hueso temporal, que contiene el oído interno y medio, y en el hueso detrás del oído. Los médicos también pueden hacer una RMN para ver si la infección se extiende hacia el interior del cerebro.
Si la persona presenta síntomas de meningitis, como confusión, rigidez en el cuello o fiebre alta, se realiza una punción lumbar y se envían muestras del líquido cefalorraquídeo al laboratorio para la realización de un cultivo.
Tratamiento de la laberintitis purulenta
Antibióticos por vía intravenosa
Drenaje del líquido del oído medio
La laberintitis purulenta se trata con antibióticos administrados por vía intravenosa. Los médicos también hacen una miringotomía. En este procedimiento se practica una abertura a través del tímpano para permitir el drenaje del líquido del oído medio (véase Miringotomía: tratamiento de las otitis recidivantes). A veces se lleva a cabo una timpanostomía. En este procedimiento se colocan tubos a través de un corte practicado en el tímpano para que el líquido pueda drenar fuera del oído medio. Algunas personas pueden necesitar someterse a un procedimiento quirúrgico más amplio para extirpar todo el hueso situado detrás del oído o parte de él (mastoidectomía).