Examen de la placenta
Después de que el bebé nace de manera segura, es hora de alumbrar la placenta. En general el alumbramiento ocurre dentro de la siguiente media hora. Cuando sale la placenta, se sostiene con ambas manos y se gira para unir todas las membranas. Debe existir mínimo sangrado que cesa con rapidez. A veces, sin embargo, queda un fragmento de placenta en el útero. Esto puede provocar hemorragia continua e infección. Este video muestra cómo examinar la placenta en busca de piezas faltantes.
Veamos primero qué sucede con la placenta desde el interior del cuerpo: después de que nace el bebé, el útero se contrae y poco después la placenta se desprende de la pared uterina. Se forma un coágulo de sangre donde se ha desprendido. El útero continúa contrayéndose, cerrando los vasos sangrantes, a medida que la placenta se mueve hacia abajo y a través del canal de parto. A veces, sin embargo, quedan restos en el útero. Incluso un pequeño fragmento puede evitar que el útero se contraiga y los vasos continuarán sangrando. Esto puede provocar hemorragia o infección.
Es importante examinar con cuidado la placenta. El lado liso y brillante estaba en contacto con el bebé en el útero. El cordón se adhiere a este lado y luego se disemina a muchos vasos sanguíneos de color azul oscuro. El lado materno de la placenta es el lado áspero, rojo y carnoso que se adhiere a la pared del útero durante el embarazo.
Para comprobar si la placenta está completa:
Sostenga la placenta en las palmas de las manos enguantadas, con el lado materno hacia arriba. Mire cuidadosamente para asegurarse de que todos los lóbulos estén presentes y encajan entre sí. Revisar los bordes de la placenta para detectar venas desgarradas que podrían indicar lóbulos adicionales. No debe faltar ninguna pieza ni deben hallarse signos de rotura cuando se estire la placenta sobre las manos. No es realmente necesario inspeccionar las membranas en busca de partes faltantes. Por lo general, el cuerpo expulsa todos los fragmentos de membrana. Si falta una porción de la superficie materna de la placenta, es probable que los restos de la placenta aún estén en el útero.
Puede ser peligroso para la madre si quedan restos de la placenta. La paciente tiene un riesgo elevado de hemorragia posparto e infección, porque el útero no será capaz de contraerse por completo. Si ve algo que sale por la vagina o sigue sangrando, explíquele a la madre que debe controlar dentro de su vagina. Use guantes estériles y examine con suavidad la parte superior de la vagina y el cuello uterino de la mujer. Use una pinza para compresas para eliminar todo resto de placenta o membrana que esté presente en la vagina. Si sospecha que el resto de placenta todavía está en el útero, transfiera a la madre para que estos restos sean retirados de manera estéril por un trabajador de la salud capacitado.
Recuerde examinar el lado materno de la placenta para confirmar que esté completa. A veces, puede quedar un resto. Los restos de placenta que quedan dentro del útero pueden causar hemorragia o infección.
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