El granuloma anular es un cuadro benigno, crónico e idiopático que se caracteriza por la presencia de pápulas o nódulos que se extienden en forma periférica formando una anillo alrededor de piel normal o levemente deprimida. El diagnóstico es clínico y a veces con biopsia. El tratamiento consiste en corticosteroides tópicos o intralesionales, tacrolimús tópico, crioterapia y fototerapia.
Etiología del granuloma anular
La etiología del granuloma anular no es clara, aunque se han propuesto mecanismos que incluyen inmunidad mediada por células (tipo IV), vasculitis por inmunocomplejos y una anomalía de los monocitos tisulares. Se han informado muchas enfermedades, infecciones, fármacos y factores ambientales en pacientes con granuloma anular, pero las asociaciones aún no están claras. La prevalencia de la enfermedad es del doble en mujeres.
Signos y síntomas del granuloma anular
Las lesiones son eritematosas, de color amarillento oscuras, azuladas o del color de la piel circundante; puede haber una o más lesiones, por lo general en el dorso del pie, piernas, manos o dedos. Suelen ser asintomáticas, aunque también pueden doler. Las lesiones suelen expandirse o coalescer formando anillos. El centro de cada anillo puede ser claro o estar algo deprimido, a veces de color pálido o marrón claro. En algunos casos, las lesiones pueden generalizarse. Las lesiones pueden parecer hipopigmentadas en la piel oscura.
Photo courtesy of Karen McKoy, MD.
Diagnóstico del granuloma anular
Evaluación clínica
En ocasiones, biopsia
El diagnóstico del granuloma anular suele ser clínico, aunque puede confirmarse con la biopsia cutánea.
A diferencia de la tiña corporal (que puede causar lesiones anulares elevadas con claridad central), el granuloma anular no tiene descamación ni prurito.
Tratamiento del granuloma anular
Para las lesiones localizadas, a veces corticosteroides tópicos o intralesionales potentes, tacrolimús tópico, crioterapia y/o fototerapia
Para las lesiones generalizadas, a veces hidroxicloroquina, isotretinoína, dapsona, y/o ciclosporina
Por lo general, no es necesario tratamiento; la resolución espontánea es común, pero puede tardar años. Para los pacientes con lesiones más generalizadas o molestas, puede desearse una resolución más rápida.
Para las lesiones localizadas, pueden usarse corticosteroides tópicos o intralesionales de alta potencia, tacrolimús tópico, crioterapia y diversas formas de fototerapia.
La hidroxicloroquina, la isotretinoína, la dapsona y la ciclosporina pueden ser eficaces para las lesiones generalizadas.
Se ha informado que la terapia con inhibidores del factor de necrosis tumoral (TNF)-alfa es eficaz para el tratamiento del granuloma anular, pero también se ha informado como un factor desencadenante potencial en algunos pacientes.
Conceptos clave
El diagnóstico de granuloma anular es clínico (p. ej., por los anillos característicos con claridad central y ausencia de descamación).
Si los síntomas son molestos, considerar varios fármacos tópicos o sistémicos, crioterapia o fototerapia.