El manganeso (Mn), necesario para una estructura ósea sana, es un componente de varios sistemas enzimáticos, incluidas glucosil transferasas específicas de manganeso y fosfoenolpiruvato carboxicinasa. La ingestión media es de entre 1,6 y 2,3 mg/día; se absorbe entre un 5 y un 10%.
La toxicidad del manganeso es más peligrosa en las personas que extraen y refinan mineral, pero incluso la exposición ocupacional de bajo nivel y los alimentos contaminados (p. ej., fórmula para lactantes) o el agua contaminada pueden ser perjudiciales. La exposición prolongada causa síntomas neurológicos similares al parkinsonismo y a la enfermedad de Wilson y también puede afectar la función cardiovascular. El tratamiento, que puede no aliviar los síntomas neurológicos, incluye eliminar la exposición y la quelación.
(Véase también Generalidades sobre deficiencia e intoxicación por minerales.)