¿Qué es la hidrocefalia?
La hidrocefalia es un exceso de agua en el interior de la cabeza. A veces se llama "agua en el encéfalo".
El interior de su encéfalo contiene varios espacios huecos que están llenos de líquido. En la hidrocefalia, hay demasiado líquido en dichos espacios.
El exceso de líquido en el encéfalo puede agrandar la cabeza de su bebé
Si la presión se acumula demasiado en el encéfalo, su bebé puede tener problemas de desarrollo
El líquido puede acumularse a causa de un defecto de nacimiento (congénito), una hemorragia dentro del cerebro o un tumor cerebral
Los médicos realizan procedimientos para drenar el líquido adicional
¿Cuál es la causa de la hidrocefalia?
El cráneo de un bebé está formado por varios huesos diferentes. Durante los primeros dos años de vida, estos huesos están conectados de forma holgada. Más tarde, los huesos crecen juntos formando un hueso sólido. Pero, antes de que los huesos crezcan juntos, el aumento de la presión del líquido en el interior del encéfalo puede hacer que los huesos se separen. Esto evita que la presión aumente de manera peligrosa, pero hace que la cabeza del bebé sea más grande. El cráneo de los niños mayores y los adultos no puede expandirse, por lo que el aumento de la presión daña el encéfalo y puede ser rápidamente mortal.
Las circunstancias siguientes pueden provocar la presencia de líquido adicional en el encéfalo:
Defectos congénitos del cerebro
Hemorragia intracerebral
Tumores cerebrales
Infecciones cerebrales
Los bebés pueden nacer con hidrocefalia o bien esta puede producirse después del nacimiento.
¿Cuáles son los síntomas de la hidrocefalia?
Los síntomas de la hidrocefalia dependen de la ubicación del líquido y de su cantidad. Un bebé con hidrocefalia puede:
Tener una cabeza anormalmente grande
Mostrarse irritable o sin interés por nada
Desarrollar un llanto agudo
Vomitar con fuerza
Tiene convulsiones
Tener protuberancias en los puntos blandos del cráneo
Tener un ojo que mira en una dirección diferente a la del otro ojo (estrabismo)
Los niños mayores pueden presentar cefalea, problemas visuales o ambos.
Sin tratamiento, los niños con hidrocefalia pueden tener problemas de aprendizaje o perder la visión.
STEVE ALLEN/SCIENCE PHOTO LIBRARY
¿Cómo pueden saber los médicos si mi bebé sufre hidrocefalia?
Los médicos realizan pruebas sistemáticas antes y después del nacimiento de un bebé para detectar hidrocefalia:
Antes del nacimiento, los médicos realizan una ecografía para medir el tamaño de la cabeza del bebé
Tras el nacimiento, los médicos miden el diámetro de la cabeza del bebé con una cinta métrica y, si es grande, pueden solicitar una tomografía computarizada (TC), una resonancia magnética nuclear (RMN) o una ecografía de la cabeza
¿Cómo tratan los médicos la hidrocefalia?
Los médicos tratan la hidrocefalia de diferentes maneras según la causa, la cantidad de líquido presente y si está empeorando o no.
Si no hay mucho líquido adicional y no empeora, es posible que su bebé no necesite tratamiento.
Para ayudar a aliviar temporalmente los síntomas, los médicos pueden:
Extraer líquido con una aguja que se introduce en el encéfalo o, a veces, en la parte inferior de la espalda (punción lumbar)
Si hay mucho líquido o el líquido está causando síntomas, los médicos pueden:
Introducir un tubo de plástico fino llamado derivación en el encéfalo del bebé para drenar el líquido
Practicar una cirugía cerebral para corregir un problema que ha provocado la acumulación de líquido
Con una derivación, uno de los extremos del tubo de plástico se encuentra en el espacio encefálico que está lleno de líquido. El tubo se pasa por debajo de la piel del bebé y el otro extremo se coloca dentro del abdomen. Así se crea una vía para evacuar el líquido del encéfalo.
Las derivaciones suelen ser permanentes, pero a veces los médicos pueden retirarlas a medida que el niño crece.
Una derivación puede obstruirse, romperse o infectarse. Si es así, es posible que la derivación deba ser reemplazada.