El granuloma anular es una enfermedad cutánea crónica, en la cual aparecen pequeñas protuberancias duras, con relieve, que se expanden hasta formar un anillo, con piel normal o ligeramente hundida en el centro.
(Véase también Introducción a la hipersensibilidad y a los trastornos cutáneos reactivos.)
El granuloma anular puede ser consecuencia de una reacción del sistema inmunitario.
Pueden aparecer uno o varios anillos, de distintos colores.
El diagnóstico generalmente se basa en el aspecto de la piel y se puede confirmar con una biopsia cutánea.
Por lo general, el granuloma anular se cura sin necesidad de tratamiento.
La causa del granuloma anular no está clara, pero los médicos sospechan que es el resultado de una reacción inmunitaria. Se han observado muchos trastornos, infecciones, fármacos y factores ambientales en las personas que tienen granuloma anular, pero el hecho de tener granuloma anular no significa que exista otro trastorno.
El granuloma anular es el doble de frecuente en mujeres que en hombres.
Síntomas del granuloma anular
Los bultos suelen ser rojos, aunque pueden ser ligeramente azulados, de un color marrón amarillento o del color de la piel que los rodea. En las personas de piel oscura, las protuberancias pueden parecer más claras que la piel circundante.
Una persona puede tener un bulto o varios. Las protuberancias pueden ser sensibles al tacto, pero no suelen causar dolor ni prurito. Suelen aparecer en los pies, las piernas, las manos o los dedos en niños y adultos.
Las protuberancias suelen expandirse hacia afuera y formar anillos. El centro de cada anillo puede ser claro o estar ligeramente hundido y, en algunas ocasiones adquiere un color pálido o marrón claro. En algunas personas, los anillos se expanden por todo el cuerpo.
Diagnóstico de granuloma anular
Evaluación médica
En ocasiones, una biopsia de piel
El granuloma anular suele diagnosticarse por su apariencia.
Puede extraerse una muestra de tejido y examinarse al microscopio (lo que se denomina biopsia cutánea) para confirmar el diagnóstico.
Tratamiento del granuloma anular
A veces, corticoesteroides inyectados o aplicados en la piel, tacrolimús aplicado sobre la piel, fototerapia o crioterapia
Para los anillos generalizados, a veces otros medicamentos
En la mayoría de los casos, el granuloma anular se cura sin necesidad de tratamiento, por lo que las personas asintomáticas no suelen requerir tratamiento. Sin embargo, la curación puede tardar años.
Las cremas con corticoesteroides o los corticoesteroides inyectados en la erupción pueden ayudar a eliminarla. Como alternativa, se puede aplicar a la piel un medicamento llamado tacrolimús. La fototerapia (exposición a la luz ultravioleta) y la crioterapia (exposición al frío) son otros tratamientos que también pueden utilizarse.
La hidroxicloroquina, la isotretinoína, la dapsona y la ciclosporina son otros fármacos que pueden ser eficaces si los anillos están muy extendidos.
Otros fármacos que deprimen el sistema inmunitario, como el infliximab y el adalimumab, pueden utilizarse para tratar el granuloma anular, pero también pueden desencadenar el trastorno en algunas personas.