Muchas criaturas, incluso los seres humanos, muerden cuando se les asusta o provoca. Entre otros se encuentran
Las mordeduras pueden causar lesiones, que van desde arañazos superficiales hasta heridas extensas, que frecuentemente se infectan con bacterias de la boca del animal causante de la mordedura o picadura.
Ciertos animales, insectos, y artrópodos pueden inyectar veneno a través de determinadas partes de la boca o con un aguijón. La toxicidad de estos venenos puede ser entre leve y potencialmente mortal. Incluso los venenos levemente tóxicos pueden causar reacciones alérgicas graves. Las criaturas conocidas por sus picaduras incluyen
Lagartos distintos de las iguanas
Picadura de la oruga de la polilla de franela o polilla gato
Los médicos diagnostican la mayoría de las mordeduras y picaduras por la información que les da la persona y mediante un examen físico. Si la herida es profunda, a veces es necesario realizar radiografías u otras pruebas de diagnóstico por la imagen para buscar dientes u otros cuerpos extraños ocultos. La forma más eficaz de evitar la infección y favorecer la cicatrización suele ser la limpieza a fondo y la cura adecuada de la herida tan pronto como sea posible. Los médicos suelen preguntar por el historial de la vacuna contra el tétanos de la persona afectada. Si es necesario, se administra una inyección de refuerzo.