La dacrioestenosis es la obstrucción o estenosis del conducto nasolagrimal que produce un exceso de lagrimeo.
La obstrucción nasolagrimal puede ser congénita o adquirida. Una causa de obstrucción congénita es el desarrollo insuficiente de cualquier parte de los conductos nasolagrimales. Típicamente, persiste una membrana en el extremo distal del conducto nasolagrimal (válvula de Hasner). Se presenta lagrimeo y secreción purulenta; el trastorno puede manifestarse como una conjuntivitis crónica, que habitualmente comienza después de las 2 semanas de vida (más a menudo, a las 3 a 12 semanas).
Existen muchas causas de obstrucción adquirida del conducto nasolagrimal. La causa es más a menudo la estenosis del conducto nasolagrimal relacionada con el envejecimiento. Otras causas incluyen fracturas anteriores de los huesos nasales o faciales y cirugía sinusal, que interrumpen el conducto nasolagrimal; enfermedades inflamatorias (p. ej., sarcoidosis, granulomatosis con poliangeítis [ntes denominada granulomatosis de Wegener]); tumor (p. ej., tumores de los senos maxilar y etmoidal) y dacriolitos.
Las causas de la estenosis canalicular puntiforme son la conjuntivitis crónica (especialmente por virus herpes simple), ciertos tipos de quimioterapia, reacciones adversas a los colirios tópicos (especialmente el yoduro de ecotiofato tópico), enfermedad cutánea autoinmunitaria (p. ej., penfigoide de la membrana mucosa, liquen plano) y radiación.
Diagnóstico de la dacrioestenosis
Evaluación clínica
El diagnóstico suele basarse en criterios clínicos. A veces, los oftalmólogos colocan una sonda e irrigan el sistema de drenaje lagrimal con solución fisiológica, con colorante de fluoresceína o sin él. El reflujo indica estenosis.
Tratamiento de la dacriostenosis
Descompresión quirúrgica o manual
Tratamiento del trastorno subyacente
La obstrucción congénita del conducto nasolagrimal a menudo se resuelve espontáneamente para los 6 a 9 meses; antes del año, la compresión manual del saco lagrimal 4 o 5 veces al día puede aliviar la obstrucción. Después del año de edad, puede ser necesario colocar una sonda en el conducto nasolagrimal, habitualmente bajo anestesia general; si la obstrucción es recidivante, puede colocarse un tubo temporario de silicona.
En la obstrucción ductal nasolagrimal adquirida, si es posible debe tratarse el trastorno subyacente. Si el tratamiento no es posible o es inefectivo, puede confeccionarse quirúrgicamente una abertura entre el saco lagrimal y la cavidad nasal (dacriocistorinostomía).
En los casos de estenosis de los puntos o los canalículos, la dilatación suele ser curativa. Cuando la estenosis canalicular es grave y molesta, puede considerarse un procedimiento quirúrgico (conjuntivo-dacriocistorrinostomía o C-DCR) que consiste en colocar un tubo de vidrio de borosilicato de baja expansión térmica (tubo de Jones) desde la carúncula (el pequeño nódulo rosado en la parte medial del canto) para ingresar en la cavidad nasal.
Conceptos clave
La dacriostenosis es congénita o adquirida.
Los síntomas incluyen lagrimeo excesivo.
El reflujo de solución fisiológica o de colorante fluoresceína al lavar el sistema de drenaje lagrimal confirma el diagnóstico.
En la dacriostenosis congénita, los síntomas generalmente se resuelven a los 9 meses; la descompresión manual del saco lagrimal puede ser útil.
En la dacrioestenosis congénita, tratamiento de la enfermedad subyacente.
Tanto para la dacriostenosis congénita como para la adquirida, la cirugía puede ser necesaria si los síntomas persisten.