El cromo, un oligoelemento, potencia la acción de la insulina. Las fuentes nutricionales que contienen cantidades suficientes incluyen zanahorias, patatas (papas), brócoli, cereales integrales y melaza. Se cree que el picolinato, un subproducto del triptófano que se combina con el cromo en los suplementos, ayuda a la absorción más eficaz del cromo.
(Véase también Generalidades sobre los suplementos dietéticos).
Acciones
Se dice que el picolinato de cromo favorece la pérdida de peso, la formación de músculo, la reducción de grasa corporal, colesterol y triglicéridos y que mejora la función de la insulina. Aunque la deficiencia de cromo deteriora la función de la insulina, existe escasa evidencia de que los suplementos sean de ayuda para los pacientes con diabetes, ni hay prueba de que beneficie la composición corporal o las concentraciones de lípidos.
Evidencia
El papel del cromo suplementario es objeto de controversia, y los datos clínicos son conflictivos.
Un metanálisis de 2002 evaluó 20 estudios clínicos aleatorizados y concluyó en que los datos no indicaron ningún efecto del cromo sobre las concentraciones de glucosa ni de insulina en pacientes no diabéticos; los resultados no fueron concluyentes en pacientes con diabetes (1).
Un análisis riguroso de ensayos controlados aleatorizados con pacientes con diabetes tipo 2 evaluó resultados clínicamente significativos (como una hemoglobina A1C < 7% o una disminución de 0,5% o más en la hemoglobina A1C) y encontró que, en el mejor de los casos, la suplementación de cromo proporciona un pequeño beneficio. Específicamente, solo en 3 de 14 estudios la hemoglobina A1C disminuyó a < 7%, y en 5 de 14 estudios, la hemoglobina A1C disminuyó un 0,5% o más (2). Un metanálisis diferente de 28 estudios informó un descenso significativo de la glucemia en ayunas y la hemoglobina A1C, aunque los estudios incluidos mostraban heterogeneidad, como diferentes dosis y tipos de cromo (3).
Un metanálisis de 2019 que evaluó el impacto del cromo en los índices antropométricos de individuos con sobrepeso u obesidad detectó una disminución pequeña pero significativa del peso, el índice de masa corporal y el porcentaje de grasa corporal. Los autores afirmaron que la magnitud del efecto fue intermedio, y la relevancia clínica para la pérdida de peso es incierta (4).
En particular, una revisión Cochrane de ensayos controlados aleatorizados sobre el uso de picolinato de cromo en adultos con sobrepeso u obesos encontró una disminución pequeña pero significativa del peso; sin embargo, los investigadores afirmaron que no había evidencia global para apoyar el uso (5).
Se necesitan ensayos clínicos aleatorizados y controlados para determinar si el cromo puede influir en la diabetes, el metabolismo de los lípidos o la pérdida de peso. Estos estudios deben controlar o ajustar el nivel basal de cromo y la forma del cromo utilizado y debe hacerse en las poblaciones en riesgo bien definidas en los que se controla la ingesta de alimentos.
Efectos adversos
Varios estudios han demostrado que las dosis diarias de hasta 1000 mcg de cromo son seguras. Algunas formas de cromo pueden contribuir a la irritación y las úlceras gastrointestinales. Se han informtado casos aislados de insuficiencia renal y de la función hepática; por lo tanto, las personas con trastornos renales o hepáticos pre-existentes deben evitar la suplementación. Los suplementos de cromo interfieren con la absorción de hierro.
Interacciones farmacológicas
El cromo puede disminuir la glucemia cuando se combina con insulina o sulfonilureas, pero no con metformina.
El cromo puede disminuir las concentraciones séricas de levotiroxina y, por lo tanto, puede ser necesario ajustar la dosis de la terapia de reposición de hormonas tiroideas en pacientes que usan suplementos de cromo.
Debido a la unión a ferritina, el uso de cromo puede causar deficiencia de hierro.
Referencias
1. Althuis MDferritin binding, Jordan NE, Ludington EA, et al: Glucose and insulin responses to dietary chromium supplements: a meta-analysis. Am J Clin Nutr 76(1):148-155, 2002. doi:10.1093/ajcn/76.1.148
2. Costello RB, Dwyer JT, Bailey RL: Chromium supplements for glycemic control in type 2 diabetes: limited evidence of effectiveness. Nutr Rev 74(7):455-68, 2016. doi: 10.1093/nutrit/nuw011
3. Asbaghi O, Fatemeh N, Mahnaz RK, et al: Effects of chromium supplementation on glycemic control in patients with type 2 diabetes: a systematic review and meta-analysis of randomized controlled trials. Pharmacol Res 161:105098, 2020. doi:10.1016/j.phrs.2020.105098
4. Tsang C, Taghizadeh M, Aghabagheri E, et al: A meta-analysis of the effect of chromium supplementation on anthropometric indices of subjects with overweight or obesity. Clin Obes 9(4):e12313, 2019. doi: 10.1111/cob.12313
5. Tian H, Guo X, Wang X, et al: Chromium picolinate supplementation for overweight or obese adults. Cochrane Database Syst Rev (11):CD010063, 2013. doi: 10.1002/14651858.CD010063.pub2
Más información
El siguiente recurso en inglés puede ser útil. Tenga en cuenta que el MANUAL no es responsable por el contenido de este recurso.
National Institutes of Health (NIH), National Center for Complementary and Integrative Health: General information on the lack of scientific evidence showing that any dietary supplement can help manage or prevent type 2 diabetes