La dirofilariasis es la infección por el nematodo Dirofilaria immitis, la dirofilaria del perro, u otras especies de Dirofilaria, que se transmiten a los seres humanos por mosquitos infectados.
(Véase también Abordaje a las infecciones parasitarias y Generalidades de las infecciones por nematodos filarias).
La dirofilariasis sintomática en los seres humanos es muy poco frecuente, pero las larvas pueden encapsularse en el tejido pulmonar infartado y producir nódulos pulmonares de límites netos; rara vez, las larvas forman nódulos en los ojos, el encéfalo y/o los testículos.
Los pacientes pueden experimentar dolor torácico, tos y, en ocasiones, hemoptisis. Muchos pacientes no desarrollan síntomas y se diagnostican debido al hallazgo de un nódulo pulmonar, que puede sugerir un tumor, en una radiografía de tórax en un estudio de control.
La dirofilariasis se diagnostica mediante el examen histológico de la pieza quirúrgica.
Los seres humanos no requieren tratamiento antihelmíntico y la infección es autolimitada.